Crítica de Condena: una joya de BBC y Movistar+

Artículo de Fran Muñoz

Una mezcla bien hecha

Si tuviéramos una coctelera para crear buenas series, sería algo impagable para cualquier productora; pues bien, ese hipotético aparato y que muchos servicios de streaming desearían tener parece haberlo encontrado la BBC, ya que tiene en su haber series míticas y con sello de calidad. Hoy nos centramos en su última joya: la serie Condena.

Así pues, usemos los siguientes ingredientes: Sean Bean, Stephen Graham, la dirección de Lewis Arnold, un guion de Jimmy Mcgovern, la BBC y una historia desarrollada en una cárcel de Inglaterra. Conseguido, ya tenemos un serión.

Aunque más bien se trata de una miniserie: lleva el prefijo mini (no como algo menor)  por el hecho de contar con solo 3 capítulos, que te harán meterte en la trama y los veras como si de un largometraje se tratara.

Un reparto de actores top mundial

El protagonista es ni mas ni menos que Sean Bean, o más conocido como Boromir en El señor de los anillos (Peter Jackson), pero también como el inolvidable primer gran protagonista de la épica Juego de tronos, serie mas que conocida, haciendo el papel de Ned Stark.

En esta miniserie hace de Mark Cobden, profesor en un instituto con ciertos problemas que le llevarán de cabeza a prisión y que iremos descubriendo a lo largo de la serie.

La interpretación que hace del personaje es única, parece que es real, y eso nos sumerge en su historia y hace empatizar con el hasta el punto de llegar a notar la sensación de impotencia en algunas escenas. ¡Gracias Sean por hacer semejante interpretación!.

Junto a él, tenemos a otro fenómeno y habitual en la BBC: Stephen Graham, otro monstruo de la interpretación y que, para mí, es considerado el Tom Hardy europeo; de hecho, tiene un papel en la gran serie Taboo (casualmente con Tom Hardy de protagonista), la cual esperamos con ansia su continuación.

Al bueno de Stephen lo podemos ver en muchas series británicas, pero por citar uno de sus últimos trabajos: The Virtues, en la cual, como no puede ser de otra manera, borda el papel.

En el caso de Condena, interpreta el papel de un funcionario de prisiones, y al igual que Sean Bean, parece que lleve haciendo ese trabajo toda su vida. Es un carcelero justo, que intenta hacer su trabajo lo mejor posible, con un historial intachable y que se gana el respeto tanto entre los presos como entre sus compañeros y superiores.

Solo la mezcla de estos dos personajes hace que la serie suba en calidad, solo por las interpretaciones que hacen cada uno. Cuando aparecen en pantalla ambos ya es un deleite interpretativo que hace que no puedas dejar de mirar la pantalla. La historia que existe detrás es como si no importara.

Otra historia sobre un novato en una cárcel

¿Cuántas series o películas sobre cárceles hemos visto ya?. Decenas, pero por poner un ejemplo, tenemos The Night of, imperdible, pero con una trama más clásica; Oz (HBO, 1997), una de las primeras gran series de HBO o la maravillosa Fuga en Danemmora (de lo mejorcito de 2018). En películas tenemos la archiconocida Cadena Perpetua o la mítica La fuga de Alcatraz con el gran Clint Eastwood.

En la serie Condena, encontramos un drama carcelario, en el que una persona es condenada a prisión. Pero que no se trata del típico preso, sino que tenemos a una persona que, a priori, encaja en la sociedad y que es incomprensible que haya entrado en ella.

De hecho, desde el principio nos muestra como el protagonista intenta cumplir con todo lo que se le ordena y quiere hacer bien las cosas. En ningún momento se le nota arrepentimiento por estar allí, y este es un punto común sobre el que gira su historia del porque esta en prisión y que iremos descubriendo a lo largo de los tres capítulos que conforman esta minisere.

En ella tendremos dos historias paralelas: la del preso Mark y la del “jefe” Eric. Dos formas de enfrentarse al sistema carcelario, conocer sus entresijos y de como deben actuar para que les afecte lo menos posible en sus vidas personales.

Al final, se trata de ver la prisión desde el punto de vista de un preso y la de un carcelero y como, aun queriendo hacer lo mejor posible sus obligaciones, chocan, pero no entre ellos, sino con la forma en la que funcionan las cárceles. Deben aprender y aceptar sus propias normas internas para poder sobrevivir. Sin duda, volvemos a encontrarnos con la ley de la jungla y la imposición de la voluntad del más fuerte.

Una serie redonda

Nos podemos imaginar lo que nos van a contar en la serie pero, como he mencionado anteriormente, esto resulta coctel en el que la historia es solo una parte más en el resultado final.

Los ingredientes principales, son los dos actores coprotagonistas de esta serie, en el que llegan a unas cotas de interpretación de 10 y que, en mi opinión, es tan buena, que al final la historia queda en un segundo plano.

Una vez vista la serie, te quedarás con ambas interpretaciones lo que seguramente te llevará a buscar más contenido de estos actores ingleses, que si fueran americanos, tendrían ya una estatuilla dorada en su poder y tendría un sitio en la alfombra roja de Hollywood.

Condena es una de mis tops del 2021, año que tuvo un arranque un poco flojo pero que está terminando con unas producciones que nadie se esperaba. Condena es una apuesta segura si te apetece ver un largometraje de tres horas hecho en una miniserie de 3 episodios de una hora cada uno, pero que cuando la terminas hubieras deseado que hubieran sido ocho. Aunque, lo bueno, si breve dos veces bueno; en este caso, mil veces bueno.

Tráiler de la serie Condena

Artículo escrito por Fran Muñoz

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