Análisis temporada 2 de Vikings

Crítica sobre la segunda temporada de la serie Vikings

Vikings ha terminado su 2da temporada y se confirma como una de las series de mayor calidad y a tener muy en cuenta. Los que pensaban que la frescura y originalidad que tenía la primera temporada era fruto del azar, se equivocan de lleno. Vikings ha demostrado ser una serie madura y magnífica tras la emisión de la segunda temporada.

El canal History Channel ha decidido meterse en la carrera por controlar parte del mercado de las series (al igual que están haciendo empresas como Netflix o Amazon) que actualmente viven lo que se ha venido a llamar, la segunda edad de oro de las series de televisión. Y ha puesto todas sus energías en producir una serie de calidad en un claro esfuerzo por apostar por la ficción, dejando paso a su programación más convencional basada en documentales.

Y con Vikings, su primera serie de ficción, lo ha conseguido y de que manera. Millones de maníacos se han enganchado a la arriesgada propuesta del canal, y se han dejado llevar por la magia de los vikingos, de sus costumbres y sus dioses.

Pero sobre todo se han dejado llevar por unos personajes de esos con los que se conecta desde el primer minuto, desde el espectacular opening en el que suena la canción If I had a heart. Un reparto coral excepcional y lleno de matices, nadie es lo que parece: los hay leales, los hay egoístas, malvados, inocentes, pero todos muy humanos, muy terrenales, lejos de los ecos del Valhalla. Movidos por un único propósito la supervivencia y la supremacía.

Ragnar Lothbrok

Pero por encima de todos ellos, uno de los grandes personajes de los últimos tiempos: Ragnar Lothbrok (Travis Fimmel). Un antihéroe que conecta con la audiencia desde el minuto uno, con su mirada felina de ojos azules y sus ademanes que encierran misterio y locura a partes iguales.

Los protagonistas complejos y violentos están de moda y Ragnar pasa a engrosar la amplia lista de protagonistas que ocupan un lugar privilegiado en el olimpo de los personajes míticos: Jax Teller (Sons of Anarchy), Walter White (Breaking Bad), Lucas Hood (Banshee), Dexter Morgan (Dexter), Tony Soprano (Los Soprano), Rick Grimmes (The Walking Dead), Nathan (Misfits) o Don Draper (Mad Men) por citar sólo algunos.

En común todos ellos tienen muchas cosas, pero sobre todo un «algo» especial y defectuoso que los hace conectar con la audiencia. Son personajes humanizados hasta el límite: violentos, groseros, malvados, delincuentes, egoístas. Pero son nuestros protagonistas y eso son palabras mayores.

Ragnar sólo conoce un leitmotiv en su vida: su familia. Por ella matará, saqueará o se adentrará a navegar por las oscuras aguas de los océanos, más allá de las tierras que nadie se ha atrevido a explorar. La verdad le hará libre, y entrará en el Valhalla persiguiendo la perpetuidad de su apellido, de su raza.

Resto de personajes de Vikings

Mención especial merece su hermano Rollo, quizá el personaje más complejo y atormentado de todos, al que quizá hay que criticar su constante cambio de rumbo, a la par que sus actos son comprensibles al vivir siempre bajo la sombra de su hermano. Pero en Vikings nada es lo que parece, lo que queda claro con el inesperado y brillante final de la segunda temporada.

Y el bueno de Athelstan, que en esta temporada refleja aún más el choque cultural y religioso de dos mundos antagónicos, que aunque conviven a no muchos kilómetros de distancia, son tan distintos como la noche y el día. Los tormentos de su religión encorsetan una moral que cada vez entiende menos. Desde que fue capturado como esclavo, unos ojos europeizados descubren una cultura fantástica e interesante. Athelstan representa los ojos del espectador, que incrédulo va descubriendo poco a poco una cultura y una filosofía de vida muy distinta a la nuestra: el placer, el respeto por la naturaleza, vivir sin miedo a la muerte.

En este contexto encontramos otros personajes fundamentales como Floki (Gustaf Skarsgard), del que descubriremos su carácter más poliédrico en esta temporada, el rey danés Horik (Donal Logue al que vimos en Sons of Anarchy) o el camino hacia la madurez de un Bjorn (que encarnado ahora por un nuevo actor Nathan O’Toole) conecta desde el principio con el espectador.

Personajes femeninos en Vikings

Por último, dos personajes femeninos de postín. No hay palabras para describir a las actrices Katheryn Winnick (Laguertha) y Alyssa Sutherland (Aslaug) que nos brindan un duelo interpretativo genial.

Laguertha en esta temporada encuentra la que será su némesis, su antagonista. Laguertha es una guerrera consumada, capaz de sacrificar a su familia por un bien mayor, representa la bravura y valentía que Ragnar exige a cualquier persona, es fuego y llama viva. La otra, descendiente de la mítica valquiria Brunilda, representa todo lo demás que Ragnar ansía: la fertilidad y la garantía de sus descendencia.

History Channel nos demuestra que se pueden hacer series de calidad, llenas de giros argumentales, acción a raudales, épica y emotividad además de acercarnos a un mundo tan interesante como el de los vikingos que ansiaban echarse a la mar para descubrir nuevos mundos. Todos los que hemos podido vivir en países nórdicos sabemos bien de lo que estoy hablando. La ficción no está reñida con la historia y la cultura.

La serie de vikingos, va claramente de menos a más y ahora mismo no parece tener un techo, la mala noticia es que la tercera temporada de Vikings llegará ya a principios de 2015 ¿Podrás esperar? Sólo el oráculo lo sabrá…